Siente el yugo
sobre su noble cerviz
el ilustre asno.
RMA
Miramos mucho, con deleite las luces
que decoran e iluminan nuestras calles,
árboles, fachadas, escaparates…
aunque solo iluminen sus fauces.
Miramos mucho y con placer la fiesta
que celebramos en casa, en los bares
o en ricos y lujosos restaurantes
sin llegar a ver, sus enormes fauces.
Miramos mucho menos hacia dentro,
a ese otro hueco, que en ocasiones late
y que gracias a él avanza este orbe.
Miramos mas bien poco al verdadero,
no al de plástico, resina o chocolate,
miremos al auténtico pesebre.
RMA
Erase una vez que se era
una oveja en un redil,
que aunque había a cientos,
ella, se sentía muy sola allí,
no llegaba a interesarle
tanto balido fútil
y si miraba en su torno
todo era en exceso volátil
nada estimulante para su neurona,
aprovechable, útil.
sin ser consciente de ello
poco a poco fue creando
una coraza infranqueable
gruñona y en exceso solitaria.
No llegaba a soportar
ni siquiera a comprender,
comer al mismo pesebre
y al volver la espalda, siempre,
alguna, balar de ella.
Su pelaje fue cambiando
como el día torna a la noche,
no así su alma, que
aunque sin alas,
pues no era un ángel,
aprendió a sobrevolar,
valiéndose de su imaginación,
por altos prados y montañas.
Por su color, bien distinta
la empezaron a señalar
¡Qué no albergaría su alma
para de negro acabar!
Tanto lo fue escuchando
que temió fuese verdad
pues llegó el día en que si alguien
al fondo de su alma
pretendía llegar,
soltaba un gruñido
y daba un paso atrás,
parecía mas bien un erizo
pues sacaba a pasear
una bonita colección
de “esaborías" espinas
con las que a las otras alejar.
Creyéndose negra
fue creciendo en una pradera
de muy blancas ovejas,
terminó descubriendo
que el color de la lana
no las hace mejores,
ni la suya, aunque negra,
a ella, la hace malvada,
a lo sumo, como mucho
tan solo diferente, mas,
con un corazón más blanco
que la luna más reluciente.
RMA
Le está matando la vida,
le está llamando la negra,
desoirá su llamada
cuanto más tiempo pueda.
Aunque nadie sea capaz
de por siempre esquivarla,
intentará vencer el tiempo
aunque solo sea de palabra.
Una palabra amable
en la que envolver una sonrisa,
unos versos de amor
con los que endulzar una vida.
Una palabra que sea el amarre
de aquel velero a puerto
para que por muy fuerte
que llegue a ser el viento
o el dulce canto de sirenas
que lo llame mar adentro
pueda, mientras resiste
disfrutar la música y el meneo.
RMA
Cómo será ese día
en que alguien despierte
y se de cuenta, que nada
tiene que ser perfecto
y que además tampoco
es imprescindible perseguir
incansablemente la felicidad.
RMA
Avanzamos por el desierto
o este simplemente
pasa por nosotros.
En la fina y caliente arena
hundimos nuestros pies.
¿Avanzamos?
Levantamos la mirada,
infinito por doquier,
no hay sendas
el desierto engulle
sin dejar huella nuestros pasos,
no es que las borre,
es como si nunca
hubiesen existido.
Solo unos pocos
logran planear unos metros
en vuelo rasante
desde algún otero,
pues, hasta a esos
les manda un céfiro
ardiente y seco
que aún pega más a sus huesos
su, ya duró pellejo
a la par que
al común de los mortales
saca lustre a sus huesos.
RMA
Hace un tiempo le hablaba
una tal Noia a su cerebro
en “besuguil" diálogo:
“Mejor nos iba
cuando no trabajabas “
“¡Serás besugo!”
Replicó indignada.
“Tú me acusabas
de inoperante y vaga
y ahora ya pienso
cosas que no pensaba,
observo cosas
que no veía
y unos calambres siento
que no sentía”.
“¿Ves lo que te digo?
Pensar mucho no es sano"
“Pensar es sentir
desangrarse la vida
entre tus manos,
pero, porqué no vivir
si de cuando en vez
puedes ver cómo el sol
sana tus sabañones
y lo sientes galopar
en tu interior,
por tus venas
dándole alas así
a tus mejores sueños”.
“Sí, por supuesto,
ese mismo sol
que a Ícaro alas dió".
RMA
Dando y dando vueltas
mi alegre neurona
ha llegado, solita ella,
a una conclusión:
que hay dos formas
de llegar a la muerte,
una es simplemente
dejar de respirar,
la otra es mucho peor
y es no llegar a vivir
aunque lata el corazón.
RMA
la luna clara
al alba desafía
donde un lucero
le brinda compañía,
bella es la luna
y el cielo es inmenso,
suele hacer frío
y enfrente aparece
un tipo gordo
redondito y caliente
y suponemos
peligroso en extremo,
está dispuesto
a ofrecernos su luz
todo ello a cambio
de unirse a nuestro cuerpo
de hacernos sombra
y si acaso tuviésemos
por un asomo
algo parecido a la luz,
diluir su brillo
entre su claridad
no sea que le haga
un rayito de sombra
a su enorme ego.
La luna clara
al alba desafía,
la acompaña un lucero.
RMA
En el fondo de un seísmo
casi siempre se encuentra
mínimo un par de placas,
tectónicas, ambas ellas.
Lo que suele pasar,
que si tú “pa'cá",
que yo “pa'llá",
así que nadie cede
y lo que suele, sucede,
de un grano de arena
en la más plana pradera
como por arte de magia
nos crece una montaña
y si mucho se restriega
y se calienta la cosa
de allí es capaz de salirnos
una herida supurosa
con la forma de un lindo
y hermoso volcán.
RMA
Acarician los años
cada una de mis arrugas
a la par que alimentan
cada uno de mis miedos.
Y he aquí lo peor,
machacan con saña
cada uno de mis sueños.
RMA
Mucho te quiero
como la trucha al mero,
como la trucha al trucho
te quiero mucho.
Mucha raspa a pescado
a este cesto ha tocado.
RMA
¿Qué tiene de malo la muerte?
Cuando nos libera
de la esclavitud del tiempo,
del estrés y el agobio,
de sentirte siempre tarde.
Qué puede tener de malo
cuando nos consigue liberar
las perentorias ligaduras
de la materia y lo material,
donde la única posesión
que nos debería importar
es la parcela de dos por uno
donde poder reposar
y echar raíces en profundidad.
Qué puede tener de malo
el paso que llamamos muerte
si hasta el mismísimo Dios
quiso experimentar qué se siente.
RMA
¿Qué tiene de malo la vida ?
Cuando al alba te despierta
la mas tierna de las sonrisas,
donde aprendes que es normal
que en la noche, la luna,
al caminar te persiga
y juntos así poder buscar
el origen del rayo de luz,
que delate donde está,
dónde, el sol se cobija.
Si además es día de suerte
a la luna acompañará
un hermoso lucero, que hará
aún más plena la vida.
iQué puede tener de malo
la senda que llamamos vida
si hasta el mismísimo Dios
quiso poder vivirla!
RMA
Recorren tus pies
este crispado mundo,
cuídate bien
que tus cuidados pies
en garras no se tornen.
RMA
No hay que olvidar
que caminantes solitarios
y soñadores empedernidos
son realmente necesarios
para que este mundo,
además de redondo
continúe girando correctamente
aún corriendo el riesgo
de pasar todos por locos.
RMA
No te parece
que desperdiciamos la vida,
huyendo tras algunas cosas
para intentar atraparlas,
alejándonos de esas otras
que por pequeñas y cotidianas
no nos percatamos que son
esas pequeñas, grandes delicias
con que podemos llenar el alma
de armonía y satisfacción.
¿No te parece?.
RMA
El dolor y la zozobra
se diluyen en la neblina
tupida del tiempo,
quedando solo la luz
de los gratos recuerdos.
RMA
Impertérrita
siembra muerte en la tierra
la otoñal lluvia,
alfombra de hojas muertas
el bosque tapiza.
RMA
Se desdibuja el sol
entre las nubes
y el océano,
extenuado
tras un largo día,
se desvanece
entre las brumas
de un sediento,
sangriento mar.
RMA
Los recuerdos como refugio
donde poder guarecerse
de un duro presente,
las más de las veces
nos asaltan cuando mayores,
quizás por eso vuelven
las batallitas de juventud,
para esquivar el presente
y para sortear un futuro
que además, casi siempre
a la par de muy duro
no sabemos si existe.
RMA
¿Venimos a este mundo
para acumular poder
e infinidad de objetos
con los que llenar cajones
o para tener muchos ceros
en una cuenta corriente ?
O para algo mas simple,
mucho más sencillo,
tanto como aterrizar
en esta vida para amar
y ser amados e intentar
¡Al menos intentarlo!
iSer Feliz!.
RMA
Hay alguien que una vez dijo
que cuanto hacemos en la vida
es buscar un buen acomodo
a este, nuestro saco de huesos.
Mas hay quien disiente y cree
que gastamos más tiempo
en agenciarnos una mullida poltrona
para sedar allí a nuestra amiga Noia.
No son huesos lo que nos inquieta,
es la gestión de nuestros miedos,
de nuestras frustraciones, del dolor
y de como será el mundo ese
en el que no llega a salir el sol.
RMA
El Fogonazo
que te muestra
en un instante tan solo
la sensual forma,
la esbelta figura
con contorno de sombra,
la oscuridad más pura
brillando con luz propia
y la impropia penumbra
que a las sombras emborrona
dándoles un punto
de sensual deseo
de carnal sombra,
de intercambio perverso
donde la luz penetra,
diluye y se diluye
entre las profundas
y más oscuras sombras.
RMA
La energía ni se crea ni se destruye, solo se transforma.
Antoine Laurent Levioser.
¿Y nosotros?
¿Somos energía?
¿Se transforma?
¿Retorna la carne
a la fría Madre Tierra
reiniciando un nuevo ciclo,
alimentando nueva vida?
o el alma, o como tengas
a bien en llamarla,
esa pila alcalina
rebosante de energía,
pues son muchas las fuentes
que le aportan cada día,
el espíritu de superación,
el amor, la risa,
una bella puesta de sol
o una simple caricia,
el solaz con los amigos,
un buen libro, música
o incluso una hoja en blanco,
cada uno como puede
recarga su batería.
Y entonces, esa energía
¿No se transforma?
¿No se recicla?
¿No iría a parar a un cielo
donde ángeles y querubines
inflan sus carrillos
atiborrándose con ella?.
¿O iría a parar a un infierno
donde el viejo Satán la usaría
para alimentar sus calderas?
Ni se crea
ni se destruye.
¿Será verdad?
RMA
¿Si tuviese música el ocaso
sería un toque de oración
por el día que perece?
O un toque de silencio
que “manum militare” impone
la oscuridad de la noche,
tal vez un “tocata y fuga"
para goce de los amantes.
Yo más bien me decanto
en que pudiera ser
una hermosa sinfonía
donde el maestro conjuga
con deliciosa armonía
la paleta con mil tonos
que le ofrece el ocaso
con el arrullo de la brisa,
las notas sueltas de un grillo,
el aroma de las flores
y de mil pájaros, el trino.
Deliciosa sinfonía.
RMA