FUENTES

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Hay cosas que siempre me han fascinado y una de ellas, sin duda alguna, es el agua.
Quizás sea, por su capacidad camaleónica , al adoptar mil y una formas, según el recipiente donde aparezca, o cuando parece que muta en su materia en las muchas formas que se nos presenta, en que nos envuelve, en que nos traspasa.

En su capacidad de dar vida, de ser vida, pues está presente, que yo sepa, en todas las formas de vida conocida. Hasta los científicos, en astronomía, cuando buscan y rebuscan en lejanos planetas o satélites, primero buscan el agua en sus diferentes formas, líquida, gaseosa, sólida, para más tarde, tratar de encontrar la magia de la vida.

Otra cosa que me fascina del agua es la musicalidad que guarda en su interior, su belleza; quien no ha dejado volar el alma, cual cometa, en la ribera cantarina de un riachuelo, mientras este, juega caprichosamente con la luz formando mil destellos; o quien no ha dejado su alma navegar plácidamente, junto a la orilla del mar al arrullo de sus olas, ebrios los sentidos de belleza, música y luz.

También hay algunas palabras que referidas al agua a mí me encandilan, nace, brota, empapa, desemboca… como la vida.
Fruto de mi gusto por el agua, es mi regusto por las fuentes, en ellas brota el agua y de forma cantarina te ayudan a saciar tu Sed, te empapan el alma.
¡Te dan la vida!
RMA