Parafraseando a la Sra. Dickinson me gustaría que estos ripios que ahora comienzan a volar por sí mismos no mueran en el olvido, sino que sean capaces de anidar en el corazón de alguien que les de calor y cobijo.
Santa María de Lebeña
Al llegar aquí tienes la sensación de haber llegado a un verdadero santuario, un santuario de paz y belleza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario