Némesis,
necesito un Némesis
que me castigue y obligue
a enfrentarle,
a levantar la cara.
Un alguien contra quien luchar
para vencer esta impiedad
que es la rutina diaria
que nos aboca a la mediocridad,
nos reduce a simples números
de una estadística infernal
que nos homogeneiza por abajo,
como un brick de marca Blanca
en un lineal de descuento
del cercano supermercado.
Necesito un Némesis
que al enfrentar su rostro
y para mirarlo a los ojos
me obligue a levantar la cara
y enfrentarme así,
sacando fuerzas
de donde no las haya,
no a él, que también,
sino para atacar el lastre
que impide al globo
elevarse y surcar los cielos
repleto de sueños.
RMA