Algunos dicen
que cuando es dicha
la palabra muere.

Yo digo, en cambio,
que justo ese día
empieza a vivir.

Emily Dickinson.

Parafraseando a la Sra. Dickinson me gustaría que estos ripios que ahora comienzan a volar por sí mismos no mueran en el olvido, sino que sean capaces de anidar en el corazón de alguien que les de calor y cobijo.

miércoles, 15 de febrero de 2017

Robásteme



Robásteme el corazón,
oscurecísteme el horizonte,
derruísteme los pilares,
roísteme las entrañas,
infectásteme el alma,
generásteme incertidumbre,
ofrendásteme el cielo.
                                  RMA

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