Dulce pañuelo de lágrimas
es el blanco papel,
donde penas y alegrías
toman forma sobre él.
Preciada válvula de presión
de esta cabecita mía
y aunque discurrir no es su pasión,
de vez en cuando se alivia.
¡Ay, mi neurona! ¡Pobre de mí!
Si a trabajar no acostumbra
¡Cómo le voy a pedir
un poquito de cordura!
RMA
No hay comentarios:
Publicar un comentario